Se busca...

Se busca el kilo de mas.

Si, si, te parecerá extraño, pero ese kilo de más que todos y todas decimos, total, un kilo, me lo quito en un plis plas con solo ponerme un par de dias con ensaladita, me tomo igual el helado, o me acabo la pizza, o repito de patatas...

ESE GRAN HIJO DE P.... que viene y no se va!!

A ESE ES AL QUE BUSCAMOS.

Si es que no hay palabras en el diccionario de la buena educación para nombrarlo. Porque claro, lerenda no hace más que perder de esos sin hacer nada, ¡¡pero es que todos van a menda!! 

¿Que pasa? ¿que le habeis cogido cariño a la casa? ¿que estais a gustito, eh, C......s?

Y ni vivo ni muerto. Lo que queremos es que desaparezca, y a ser posible, sin dejar rastro. Nada de pellejos como he visto a alguna gente que uno no sabe que era peor, si cuando estaban "rellenitos" (palabreja que decimos los que estamos gordos solo para darnos ánimos) o el temido y asqueroso efecto yo-yo (que el que haya pasado por él sabe lo que es tener el armario con tres o cuatro tallas y que ninguna sea la buena y que te digan:

- pues si tienes ropa. 

- pero no me cabe.

- pues tirala y comprate nueva

- ¿y si me adelgazo y me vuelve a ir? o, peor, ¿y si me compro nueva ropa que me vaya y como me va me descuido porque no me aprieta y en tres meses tenemos que volver a cambiar de talla?

Y eso de que una dieta y venga, ja ja ja. ¡Me rio yo! Porque tu cuerpo es sabio, y sabe lo que quiere. Y sabe que es más feliz cuando te comias un par de huevos fritos con chorizo y patatas idem y no una simple ensaladita sin aceite sin olivas y sin cariño.

Porque estar a dieta es acabar con esos fritos, esos aceites maravillosos que regan las verduritas, esa parte de grasilla que es lo que le da gusto a la carne, no ponerle aderezo al pollo (que si, que no tiene grasa a la plancha, pero que seco está por todos los dioses)

Y que uno se cansa. Que es toda la vida igual. Que no nos engañemos, que los que estamos gordos no es por que si. Es porque la ensaladita con nueces y pasas está de miedo. Y ese bistec que has dejado macerando con vinagre, perejil, aceite y un punto de sal está de vicio acompañado por las patatitas. Que la mayonesa está buena. Y que el chocolate es DIOS con mayúsculas y los muffins de chocolate los inventó el diablo, como mínimo.

Y tampoco me vale esa máxima de uno está gordo y hermoso y divino. Porque hay gordos que no estamos tan gordos como para lucir nuestras carnes con un gesto de desprecio hacia el resto de mortales marca huesos. Hay gordos que somos lo que somos, esa complexiópn que deberia ser lo que se conoce como atlética, pero que hemos dejado el gimnasio de vacaciones. Que ni estamos gordos para las grandes tallas, ni normales para las tiendas multimarcas. Que encontrar un pantalón es un suplicio porque ya no sabes en que demonios de tienda mirar.

Si, a ti, kilo, te pongo un cartel de se busca. Porque me habeis dejado dos en una semanita porque me he portado bien y he caminado. Pero que yo se que no os habeis ido, que estais agazapados bajo la cama, esperando esos dias de relax que me tomaré en breve sin hacer nothing de nothing y donde no habrá el café con sacarina de la mañana porque , j...r, estamos de vacaciones!! Ahí volvereis. Y si solo regresais los dos que os fuisteis, daremos las gracias. Pero se que en ausencia de mi presencia os multiplicais como las cucarachas. Pero como no moris, pareceis virus que se propagan a mi alrededor, esperando el momento en que mis defensas de hallen bajas para tomar al asalto mi bello cuerpo para convertirlo en bellísimo.

Se busca, más muerto que vivo, el kilo de más.